Protector solar todo el año ¿Por qué es importante?

Cada vez estamos más concienciados del efecto “memoria” y acumulativo de piel, lo que significa que esos días de sol intenso en la playa para obtener un bonito y rápido bronceado a los 20 años pueden reflejarse en la epidemis después de cumplir los 40. Y es que la naturaleza no creó el “moreno” para vernos más guapos (aunque favorece y mucho) sino como mecanismo de defensa para proteger al núcleo celular de las células de la piel de sufrir daños por radiación.

También sabemos que la exposición prolongada al sol sin protección provoca envejecimiento prematuro, manchas y melanomas (tumores malignos), así que no solo es una cuestión estética sino que está en juego nuestra salud.

Pero cuando el sol empieza a brillar con menos fuerza y entramos de lleno en el otoño, el protector solar tiende a ser olvidado en el fondo del neceser, y no debería ser así porque incluso en un día nublado los rayos ultravioleta, en mayor o menor porcentaje dependiendo de la densidad de las nubes, nos alcanzan.

Es imposible ir atrás en el tiempo y corregir todas las veces que nos hemos expuesto al sol sin protección, pero sí que podemos ser conscientes y de ahora en adelante incluir la prevención en nuestra rutina diaria.

Por eso te vamos a dar algunos consejos para que uses correctamente el protecto solar, eso sí ¡Todo el año!

1- Usa protector solar todos los días después de tu crema hidratante habitual y antes del maquillaje. Extiéndelo en cara, cuello y escote.

2- El factor de protección solar que sea como mínimo de 30.

3- Maquillarse es dar a nuestra piel una capa más frente al exterior, así que es beneficioso, pero si además tiene factor de protección incorporado mucho mejor.

4- Aunque no salgas de casa o vayas a estar en interiores también debes usarlo, y es que la luz artificialque emana del ordenador o del móvil por ejemplo también puede dañar tu piel, (como ahora mismo).

5- Cuidado con los botes abiertos demasiado tiempo, no los guardes de un verano para otro porque las propiedades pueden no ser las mismas.

6- El sudor, el agua, o restregarse la piel hacen que la capa de crema sea más fina, o desaparezca por completo. Reaplicar y reaplicar, más vale pasarse por mucho que por poco. En verano y en la playa como mínimo cada 2 horas.

7- La industria de la cosmética a lanzado en los últimos años una gran variedad de formatos, descubre cuáles son los que más se adaptan a tu piel y a tu modo de vida para que te sea fácil y cómoda su aplicación. Tienes texturas como geles mucho más ligeras, cremas con color, brochas con polvos protectores (ideales para llevar en el bolso y aplicar sobre el maquillaje) stickers más densos para zonas más delicadas, etc.

8- Ten varios protectores solares, uno en el baño, otro en el bolso, en el coche, etc. y siempre donde no les de el sol directamente. Así no te pillará nunca de imprevisto.

9- Utiliza gafas de sol, sombreros… cuánta menos radiación le llegue a tu rostro mejor.

¿Y qué pasa con la vitamina D?

Efectivamente. Hay que tomar el sol sin protección. (¿Cómo? ¿Nos hemos vuelto locos?)

El sol es beneficioso y necesario para nuestro organismo en su justa medida. Lo ideal sería que cada día, tomáramos el sol al menos en un 30% de nuestro cuerpo (que no sea el rostro que ya está expuesto todos los días y es lo que más se ve) durante 10/ 15 minutos. La vitamina D es esencial para nuestros huesos y muchas otras cosas, por eso tomar el sol de forma moderada sin protección solar en los brazos, espalda o piernas a diario, o todos los días que sea posible es muy positivo para nuestro organismo.

Además, el sol influye en nuestro estado de ánimo ¡Es nuestro aliado! con la protección adecuada podemos y debemos disfrutar de él.